Los procesos naturales son poderosos porque nos enseñan cómo funcionan las cosas. La luz del día, la gravedad, la noche sin luna, los rayos, terremotos, el viento, el mas, la lluvia, el sol, las plantas, los animales, nosotros mismos, las estrellas, el universo, y tantas cosas más. Prestemos atención a este orden natural. Aprendamos cómo funciona.

Imagínate qué sucedería si cada uno de estos procesos fuera neurótico, o sicópata, egocéntrico. La gravedad cambia súbitamente, el sol decide no salir porque se escondió con la luna, que tampoco aparece. Llueve cualquier cosa, piedras, plumas y hasta mierda.

El líder inteligente sabe esto, en no ser neurótico y egoísta.

El poder radica en saber qué sucede y actuar acorde. Paradójicamente la libertad está en obedecer esas leyes u orden natural. La creación es una sola, la separación es una ilusión.

Todos estamos en el mismo equipo. Solo que estamos haciendo autogoles, disparando contra nuestra meta de país.

El poder proviene de la convivencia, la cooperación, el servicio oportuno con desapego.

La tierra y el cielo existen para servir a toda la creación. Un líder sabio sabe de esto y se desapega de su ego para servir a los demás.

¡Cero egoísmos Nicaragüa, máximo servicio y apoyo a los demás, aprendamos a convivir todos!

Carpe diem

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